Era el sonido de la música
la que me hacía querer volver a vivir, cuando estaba por rendirme, la música me
volvía a la vida, ir un día normal en la calle, después de haber llorado por un
amor, puede volverse un camino estupendo, ir con el aire frió en el rostro, ver
el cielo nublado y sentir frió, puede hacer
que me vuelva increíblemente loca, sonreír y ver todo de una manera
distinta, escuchar una gran canción,
entenderla, saber lo que el cantante quiso decir al escribirla, todo eso puede
hacerte sentir de maravilla.
Moverse incluso de manera
distinta, ir y venir y creer que no hay un mejor momento que ese, ese minuto de
felicidad en el que te sientes plena de todo, es una paz interior maravillosa,
sé que no soy la única que lo ha sentido, es como ir en un vídeo, escuchando tu
canción favorita, cantar, reír, bailar, correr, es una sensación de libertad
que no tiene comparación.
Hace unas horas mi mundo era
un desorden, sentía dolor, tristeza, pensaba en que las cosas no podían ser
peor, pero de un momento a otro sentí que todo iba a estar bien, decirle a
aquel chico lo que realmente siento, es como soltar a un ave que estuvo
encerrada por años. By: Saraa L. Morgan
No hay comentarios:
Publicar un comentario